sexta-feira, 27 de fevereiro de 2009

Emoción


A pocas horas del día que me darán mis 38, mi mujer me dijo asombrada: Pareces un niño de tanta emoción (yo estaba emocionado por la llegada de mi fiesta de celebración), la miré y para que entienda mi alegria, le dije algo en lo cual creo firmemente:

Amor, ni para la alegria, ni para la emoción, hay edad.
Y continué...

Para vivir bien, lo mejor es ignorar ciertas cosas y el tiempo es una de ellas, Yo simplemente vivo con la misma emoción de siempre, sin pensar que tengo 10, 15 o voy a cumplir 38.

Un amigo nicaraguense me dijo un día: Nunca dejes de hacer las cosas que te gusten, así tendrás una buena vejez, llena de buenos recuerdos, y esto, es lo unico que al final nos queda.

En el arte de crear emociones nuevas, de emocionarse por las pequeñas cosas, es donde esta la llave para ser un poquito más felices.
Saludos desde Brasil

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